A veces asociamos ser guapa con tener fotogenia. Pero esto no es así: hay gente que es guapísima y en las fotos sale terriblemente mal y, en cambio, hay personas que sin ser nada del otro jueves consiguen aparecer en las fotos como si fueran supermodelos.
La fotogenia es algo que algunas personas tienen por naturaleza. La buena noticia es que se puede entrenar, aquí van unos consejos:
1) Adopta una buena postura
Salir encogida sobre una misma como Quasimodo no favorece a nadie. La chepa no es cool en absoluto. Así que estírate, estírate mucho, coloca los hombros hacia atrás y saca un pelín el culete. ¿Recuerdas cuando tu madre te decía en tu adolescencia que fueses recta? Pues razón tenía.
2) Presta atención a la barbilla
Una de las principales obsesiones de las mujeres es que no nos salga papada al hacernos la foto. Los adultos tendemos a subir la barbilla para evitarlo, pero esto es un error.
Uno de los trucos es que adelantes la cabeza como si fueras una tortuga. Generalmente da la risa y eso relaja el ambiente, pero consigues el objetivo. Eso y la conexión ‘barbilla-hombro’ son los grandes trucos.
Podemos inclinar también la cabeza pero…¡ojo con los ángulos! Si no va a parecer que nos ha dado un aire.
3) Nada de estar de frente
Los seres humanos normales debemos evitar hacernos fotos completamente de frente porque ¡es muy poco favorecedor! Lo de ponerse ligeramente de lado ayuda…
4) Intensidad en la mirada
¡Evita la mirada muerta! Hay que sonreír con la mirada, consiste en concentrar la intensidad en los ojos para que no se nos quede la mirada sin vida. Para eso, hay que entrecerrar los ojos (squinch) que es un buen truco para salir bien en las fotos. Eso sí, entre una mirada interesante y una mirada de borracha somnolienta hay un paso muy pequeño, así que no te pases.
5) El pelo, justo y necesario
Aunque parezca bastante obvio, es importante peinarse. Es preferible que la cara no aparezca demasiado despejada y poner algo de pelo sobre los hombros, un mechón sobre la frente, algo que rompa el estatismo y aporte algo de volumen
6) No exageres
Una mala noticia: las modelos son divinas. Ellas empiezan a poner caras y cambiar el gesto cada segundo y están estupendas de la muerte. Si estás haciendo un reportaje tipo myblogger vale, pero el reportaje del día que fuisteis a comer de picnic al parque no es el momento adecuado para probar poses imposibles. Más que nada porque, sin contexto, la mitad de las fotos quedarán ridículas.
7) Esa boca…
Otra mala noticia: a la mayoría, al poner morritos, se le pone cara de pato y esto no es especialmente favorecedor. Para salir con un gesto poco exagerado, lo mejor es entreabrir la boca pero sin enseñar los dientes y con el rictus relajado. Un truco es colocar la lengua en la parte interior de los incisivos para conseguir una bonita sonrisa. Ah! Y olvídate de lo de “patataaa”.
8) Un selfie, por favor
¡Nos encantan los selfies! Vemos como salimos antes de hacernos la foto, controlamos los ángulos tanto de la cámara (ese favorecedor picado) como el nuestro propio (nunca completamente de frente para no parecer un pez globo). Pero todo tiene sus trucos
No es recomendable hacerse un selfie sin utilizar el temporizador. Acertar con el disparador sin que se nos caiga el teléfono y aguantando la pose es complicado, así que es mejor poner el temporizador, posar y que la foto salga sin tener que darle al botón.
9) Y el final.. el truco infalible!
Relajada vas a salir siempre mejor. Así que deja de pensar en lo mal que sales siempre, deja de poner caretos de nerviosismo y déjate llevar.