Muchas veces limpiamos bien las brochas para no depositarnos suciedad en la piel, pero no tenemos en cuenta que el maquillaje también habría que limpiarlo de vez en cuando porque se llena de bacterias y de la propia grasa de nuestra piel.
En este artículo de hoy os queremos dar unas sencillas pautas para mantener y conservar adecuadamente nuestros productos de maquillaje.
1. Labiales. Para limpiar un labial, simplemente hay que pasar un papel por encima de la superficie que usamos. Para los labiales líquidos o gloss, solo podrás limpiar el aplicador con un poco de alcohol de 96º y un pañuelo (algodón no porque deja pelusillas).
2. Polvos compactos, sombras y productos en crema. Para los polvos compactos, os recomendamos que rasquéis un poco la superficie, porque pueden haber quedado restos del aceite de nuestra propia piel que a la larga hace que no se agarren tan bien los polvos en la brocha. También podéis rociar un poco de alcohol por encima y después pasar un papel, sin apretar demasiado y arrastrando.
3. Máscara de pestañas. Para lavar la máscara de pestañas, puedes rociar un poco de alcohol de 96º en el aplicador y luego pasar un papel. Esto también os ayudará a quitar todos los grumos que se hacen. También lo que podéis hacer es usar cada vez un aplicador desechable.
4. Delineadores en lápiz. ¡Tan fácil como sacarles punta! Y para los delineadores en gel, puedes pasarle un poquito de alcohol (de 70º, que es el que desinfecta más). Para los delineadores líquido, solo podrás limpiar el aplicador rociando alcohol y pasando un papel.
Realmente es súper fácil limpiar nuestros productos, solo tenemos que encontrar el rato para hacerlo. Y no solo limpiéis el producto en sí, no está de más limpiar el packaging, espejito y todo lo que veáis. ¡A ponerlo en práctica!